lunes, 21 de mayo de 2007

LA TRIANGULACIÓN

La triangulación es un proceso que permite el control de levantamientos extensos, los cuales hechos mediante polígonos presentarían fuertes errores debido a la gran cantidad de lados que este tendría.

En terrenos muy abruptos el proceso de triangulación es muy útil permitiendo tomar en cuenta los detalles; también es utilizado en los levantamientos fotogramétricos, hidrográficos, zonas costeras y ríos.

Un sistema de triangulación se conforma de triángulos adyacentes encadenados según sea necesario, y conociendo una sola distancia y todos los ángulos de los triángulos, se calculan todos los lados y las coordenadas de los vértices. Cada triángulo tendrá cuando menos un lado común con el triángulo siguiente. En este procedimiento se toma una longitud medida directamente y se conoce como la base de la triangulación (si se requiere se pueden medir dos bases para la comprobación).

La triangulación brinda facilidades ya que para pasar de las coordenadas de un punto hacia otro muy lejano se tiene una línea evitando así el alto nivel de incertidumbre que sí se trabajase con polígonos.

En los sistemas se utilizan triángulos, polígonos con vértice central o cuadriláteros con diagonales.

Los triángulos empleados en el proceso deben ser lo más posible cercanos al equilátero. Los mejores resultados se obtienen limitando los ángulos entre 30º y 120º, no obstante se pueden utilizar ángulos diferentes. Los vértices deben escogerse de manera que haya visibilidad en ambos sentidos de las líneas, casi siempre son puntos notables sobre lomas, cerros, entre otros, donde deben construirse mojoneras.

Las triangulaciones pueden ser de varias clases, de primer orden y segundo orden que constituyen figuras muy grandes y se consideran geodésicas, y las de tercer orden son consideradas topográficas y son las más comunes. En los trabajos de levantamiento se pueden utilizar triangulaciones de diferentes órdenes según se requiera.